sábado, 25 de agosto de 2018

APRENDE A ELEGIR TUS ZAPATILLAS DE RUNNING


La duda y la incretidumbre a la hora de comprar una zapatilla de running, sobretodo para principiantes, es siempre la misma, que tipo de zapatilla compro. Hoy os traigo un artículo que os enseñará primero a ver los tipos de zapatilla y sus partes. De esta manera aprenderemos algo sobre material y nos ayudará a la hora de elegir nuestro próximo par de zapatillas. También los tipos que hay y el comportamiento que cada una puede darnos a la hora de correr en cuanto a agarres, tracción, etc.

PARTES DE UNA ZAPATILLA DE RUNNING:

Plantilla: Pieza acolchada situada en el interior de la zapatilla que une la media suela con el pie.

Drop: Diferencia de grosor en mm. Entre la suela en la zona de apoyo del talón y la zona del ante pie y dedos (en calzado minimalista suele estar entre 0 y 4 mm. y en calzado tradicional entre 12 mm. y 15 mm.)
LA SUELA:

Es una de las partes que mayor grado de diferenciación aporta al material. Unas zapatillas para jugar tenis, tienen una suela distinta que unas zapatillas para correr.

Es la parte que está en contacto directo con la superficie por la que corres. La elección dependerá de si la superficie es asfalto, pista, hierba, nieve o montaña.

– Los verdaderos protagonistas son el relieve con el que está marcada la huella, los conocidos tacos.

Se diferencia el material del que están construidas, por su disposición a lo largo de la suela, la forma que presentan y su altura. Cada marca y modelo tienen un dibujo diferente con una intención determinada que conviene observar con detenimiento. Algunos modelos presentan un taqueado homogéneo pero la gran mayoría llevan un taqueado diferente para dar una función determinada a cada zona.

En definitiva, el dibujo que encontramos en la suela, tiene una objeto para conseguir el máximo de prestaciones y comodidad, por lo que dependiendo del uso que tengas previsto, tu elección debe ser una u otra…


Suela zapatilla asfalto

Los modelos de trail llevan un taqueado específico que ofrecen las mejores garantías en esos terrenos. Es un taco más profundo, con mayor separación entre ellos y con una suela ligeramente más duras, que garantiza que no te claves o sientas en la planta del pie, la pisada o paso por encima de piedras puntiagudas o similares.


Suela zapatilla trail

– Algunos modelos de este tipo de zapatillas, las zonas de mayor impacto y consecuente desgaste (talón exterior y metatarso interior) suelen tener un compuesto algo más duradero con un color diferente.

– Hay modelos que presentan huecos en el talón reforzados con grandes tacos alrededor, que dan estabilidad a la zona, dejan visible el material de la mediasuela y aligeran algunos gramos su peso.

– El arco, puente o zona entre la parte trasera y delantera de la zapatilla, tienen una composición muy recia, si pretendes ver su flexibilidad, quizás te sorprenda que no lo hace en más de 30 o 35 grados. Conviene coger la zapatilla en las manos y probar su flexibilidad longitudinal y la transversal, es decir su torsión.

Algunos modelos presentan una pieza estabilizadora que da equilibrio al conjunto y fluidez a la pisada desde que se pisa hasta que se despega de la superficie. Para corredores de mayor peso es recomendable una zona media algo más rígida que contenga la pisada.

– La parte delantera suele presentar surcos que cortan la suela de forma trasversal y comunican con la mediasuela para facilitar la flexión correcta del modelo. Justo debajo de los dedos de los pies.

La pisada natural sin calzado, se ejecuta con un movimiento sutil de los dedos de los pies, que provocan la flexión debido al impulso, por lo que este mecanismo de debe mantener con el calzado puesto y a mayor similitud de este movimiento sin calzado, mejor adaptación al mismo y más cómodo.

Una zapatilla de mayor rigidez de esta zona suele ayudar a una rápida fase de transición y despegue con un tacto más limpio y seco, se gana en durabilidad aunque se pierde algo de tacto del terreno y eso necesita de una adaptación progresiva, para evitar molestias o lesiones.



Surcos y zonas de flexión, con piezas blandas en color azul y piezas más resistentes al desgaste en color negro.

LA MEDIASUELA:

Es una de las partes más importantes. Se trata de la zona en la que se encuentra la suela y el botín en el que encaja el pie. Su función principal es dotar de amortiguación, transición, protección y estabilidad al pie y la pisada.

La amortiguación se la da el tipo de compuesto y su espesor. Aquí existe una gran variedad dependiendo del fabricante.

Las marcas están permanentemente investigando e innovando para dar un toque diferente a cada uno de sus modelos, con una funciones específicas y exclusivas para cada uso. Es una particularidad clave y conviene analizarla bien.


La mayoría de marcas utilizan la EVA (baja densidad, ligero y flexible) con gran capacidad de amortiguar el impacto.

Se presenta con diferentes capas y con diversas densidades para consolidar la pisada, lo que provoca una transición en la zancada desde el aterrizaje hasta el despegue.

Hay marcas que utilizan estabilizadores, para que la zapatilla tenga un comportamiento más sólido.

Se le presta especial atención a la biomecánica correcta del corredor y de su adaptación más anatómica posible con cada modelo.

Por ejemplo:

– La zona del ante pie donde tenemos situados los metatarsos y falanges, es la parte habitual de aterrizaje en corredores experimentados o con una buena técnica de carrera. Hay buscar un contacto mínimo y rápido en cada zancada. Es la zona ideal de contacto en ritmos rápidos.

– En la zona media o trasera internas, una buena zapatilla lleva una capa de mayor densidad o elementos rígidos que evitan el exceso de caída del pie hacia el interior. A esto se le llama pronación y puede ser excesiva en algunos corredores por lo que se fabrican modelos destinados a pronadores ó aquellos de mayor peso y que lógicamente, tienden a hundir más esta zona del pie.


¿QUÉ ES EL PERFIL DE UNA ZAPATILLA?

Existen dos tipos de perfiles, trasero y delantero. Esto supone la diferencia entre la altura a la que se encuentra tu pie y el suelo.

Sin embargo, la suela y mediasuela dan esta altura a la zapatilla.

– El perfil alto en el talón es apropiado en modelos de entrenamiento o de corredores de mayor peso que necesitan consistencia…

A mayor altura se pierde estabilidad ya que lógicamente se encuentra más alejado del suelo, del centro de gravedad y se vuelve algo más inestable. En estos casos se equilibran con refuerzos, hormas más anchas que aumentan la superficie de apoyo.

– Un perfil más bajo es más cercano al suelo, aumenta la sensación sensibilidad con el terreno y es propio de corredores más ligeros y experimentados que buscan velocidad y un tacto ligero.

– Las zapatillas minimalistas o también conocidas como voladoras, son aquellas con un mínimo de altura sobre el suelo.


Proyectan una pisada natural, muy cercana a la sensación de correr descalzo, lo que eso a todos los niveles conlleva.

¿DROP EN UNA ZAPATILLA?

El drop es la diferencia de altura entre el perfil trasero y delantero. Se mide en milímetros.

A menor drop mayor sensación con el terreno, pero también menor protección artificial y un aterrizaje en la pisada más adelantado con el mediopié.

Cuando corres descalzo no aterrizas con el talón, tu instinto biomecánico y de protección articular genera una pisada adelantada con la zona media o del mediopié.

Esa es sensación que se busca con zapatillas minimalistas, voladoras o de drops inferiores a 6 mm. Provocan respuesta rápida con mínimo soporte.

Las zapatillas con más drop, hacen proporcionalmente lo contrario, ya que protegen una pisada con el talón.

El equilibrio entre drop y perfil varía de unos modelos a otros, de unas marcas a otras, ya que buscan una intención diferente, que el propio usuario tiene que experimentar.

¿LA HORMA DE UNA ZAPATILLA?

Es el ancho de la zapatilla, en algunos casos se trabajan anchos especiales con mayor o menor anchura para dar cabida a todo tipo de necesidades.

UPPER O BOTÍN.

El upper es la zona que envuelve el pie, está cosida en su perímetro a la media suela y podemos distinguir diferentes elementos:

– Mesh, es tela que cubre el pie. Suele estar perforado para garantizar la transpiración, o paso del calor interior al exterior.

Existen mesh más fresco y otros para condiciones de lluvia, más cerrados o con membranas impermeables.


– Protección interna garantizan un confort del pie. Es importante la zona del collar, es esa que rodea el talón, que esta sea suave y convenientemente protegida, da protección a la zona del tobillo y talón de Aquiles.

Conviene fijarse en las costuras internas de modo que estén bien acabadas. La mayoría de modelos de alta gama están construidas en una sola pieza, libre de costuras que puedan hacernos rozaduras. A esto se le llama tener una terminación full.

– Protección de la puntera. Muy importante en los modelos de trail, para evitar golpes con los obstáculos propios de la montaña (rocas, raíces,…).

– Protección en el lateral. Suelen ser termosellados en ambos laterales, junto con el logo de la marca. De esta manera se ajusta al pie dando envoltura y solidez al mismo.

Las zapatillas de trail suelen tener unos faldones en el lateral para evitar roturas, ante las exigencias de la carrera de montaña.

– Protección en el talón. Esta zona es especialmente sólida en la mayoría de modelos. Suelen tener unas tiras de goma que rodean la zona, dan consistencia a esta parte articulada y fuerte del pie, como es el tobillo y talón.

– Lengüeta. En la mayoría de los casos la gente no sabe muy bien para que sirve. Permite introducir el pie en el interior y cerrar una vez tensamos los cordones. Es importante que esté suficientemente acolchada, sin excesos, y compuesta de un tejido suave como para sentir un buen confort. Ahora suele venir internamente cosida al lateral para evitar que se mueva y envolver completamente el empeine, evitando la entrada de elementos y suciedad.

– Plantilla. Una buena zapatilla sin una buena plantilla no cierra el círculo de confort. de diferentes espesores y compuestos, normalmente perforada para equilibrar el calor interior.

La superficie en contacto con la planta del pie suele ser de un material suave. La parte en contacto con la media suela es de un material que evita el deslizamiento al correr. Hay materiales avanzados que evitan la aparición de bacteria o mal olor.

– Ojales. Se sitúan en ambos lados, justo en la parte superior de una manera simétrica y por la que pasan los cordones. Cada marca y modelo tiene pequeñas diferencias en esta zona. Es importante que los cordones pasen holgadamente por ellos, garantiza un ajuste progresivo y adaptado a la forma del pie.

– Cordones. Se encuentran de diferentes formas y compuestos. Su función principal es cerrar, ajustar el conjunto de la zapatilla correctamente. No es necesario que sean muy largos, para evitar enganchones. La mayoría de modelos incluyen un último ojal que no suele usarse.


¿PARA QUÉ SIRVE EL ÚLTIMO OJAL?

Principalmente para dar un mayor ajuste a la zapatilla en caso de necesitarlo, mantener la lengüeta en su sitio sin que se mueva, aportando mayor sensibilidad sobre la pisada y el terreno.

Se utiliza en situaciones muy concretas.

Elige bien y si no quieres jugar con tu salud, mírate bien el catálogo de Mizuno.

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